El Valle de Tena, debido a su cercanía con el país vecino, Francia, ha tenido como misión proteger al resto del país de las posibles invasiones. Es por ello que a través de sus pueblos se pueden observar distintas fortificaciones, como castillos de los siglos XV-XVI, fuertes y del reciente siglos XX búnkers.
De las más recienes fortificaciones nos quedan aquellas pertenecientes a la Línea P o Línea de los Pirineos. Mandada construir por el General Franco tras la finalización de la Guerra Civil Española, se trata de la mayor obra defensiva construida en Europa después de la II Guerra Mundial (otoño de 1944), ya que abarca toda la cordillera de los Pirineos, desde el Cantábrico hasta el Mediterráneo. Esta, además, es también la mayor obra de ingeniería militar de España, que tenía como objetivo la impermeabilización de la frontera con Francia para protegerse de una posible invasión a través de los Pirineos. Esta obra nunca fue terminada y nunca llegó a entrar en servicio.
En Aragón, la línea P se divide en 5 sectores y cada uno en núcleos de resistencia (N.R.), en la zona de Sallent de Gállego se encuentan los N.R. 108, 109 y 110.